Ah, la modernidad… Páginas y páginas se han escrito sobre esto de ser moderno, que no se sabe si está bien o está mal, o si da igual. Llevado al ámbito de la decoración ser moderno es… Buena pregunta. ¿Estrambótico? No, hombre. Pero sí se persigue cierta relectura de la tradición, cierta independencia, cierta funcionalidad…

¿Conoces el refrán “Consejos vendo que para mí no tengo”? Como cada cual tiene sus gustos y circunstancias, es difícil dar a los demás ideas sobre cómo decorar una casa para aplicarlas así, sin más. Así que, más que ideas específicas, desde Spotahome queremos a ofrecerte unas ideas genéricas que pueden servirte para orientarte en general y sacar ideas propias por tu cuenta.

El reciclaje es una de las esencias de la modernidad

  1. Don’t look back in anger. Lo retro, lo vintage, lo viejuno triunfa. Si tienes entre las manos la herencia de la abuela, plantéate si lo mejor no será dejarlo todo tal y como está. Bueno, puedes quitar los tapetes de ganchillo… Lo que queremos decir es que aproveches todo lo posible, algunas cosas pueden cobrar nueva vida con una capa de pintura o un tapizado original.
  2. Menos es más. El rollo minimalista nunca pasa de moda. Seré yo, que me agobian más de dos sillas en la misma habitación, pero la idea es decorar, no cargar una casa de cuadros, alfombras, lámparas, etc. Así que no te vuelvas loco, a veces la solución no pasa por poner, sino por quitar algún elemento.
  3. El viejo buen DIY. Pues eso, ¡hazlo tú mismo! Reconozcamos que no todos valemos. Servidor, no. Pero desde que se inventaron el Instagram y los tutoriales de Youtube, el que no se pone creativo o copia descaradamente al vecino es porque no quiere. En serio, inspírate sobre qué hacer y cómo hacerlo a golpe de click. Aunque seguramente no te quede igual de resultón…
  4. La solución IKEA. Vale, no es muy creativa que digamos, pero es barata, rápida y funcional. Y reconozcamos que estos chicos suecos tienen cosas muy resultonas. Si no te importa ser uno más de los cien millones de orgullosos propietarios de la mesa Frotingen (que no tiene por qué) no te compliques. A lo mejor en una tarde lo tienes resuelto. Sólo te falta montarlo.

Cada cosa de un padre y una madre: muy moderno

  1. La basura de unos hombres es el tesoro de otros. ¿Nunca has visto por ahí algún mueble tirado que te hubieras llevado? Pues no te cortes. En España es algo más complicado, pero en Europa te amueblas un cuarto en dos semanas fijo. La solución si no te gusta mucho gastar en diseño, ni comprar en IKEA, ni eres capaz de hacerte algo apañado por tu cuenta: las rondas nocturnas. Eso sí, llévate un colega.
  2. El maravilloso mundo del europalé. A lo mejor hay que ceder ante la evidencia y rendirse a los aromas amaderados y postindustriales del palé, ese versátil amigo de todas aquellas gentes con imaginación, un martillo y la suficiente imaginación para recombinar tablas como si de un tetris se tratara. Mesas, camas, estanterías… eso sí, hace falta cierta habilidad y creatividad. Te remitimos al punto 3 para más info.
  3. Elementos fuera de contexto. Eso es definitivamente de modernos. Una rama seca como perchero, tarros en lugar de vasos, grifos por pomos en las puertas… Todo un universo de reinterpretación de los objetos cotidianos se abre ante ti. Procura, eso sí, que los nuevos elementos cumplan su función tan bien como los que están sustituyendo. Bravo, Duchamp estaría orgulloso.

Como ves, reutilización y modificación de elementos antiguos o con otros usos son la base de una decoración moderna o actual al alcance de cualquiera. El ingrediente fundamental sigue siendo, en cualquier caso, la imaginación. Si no, siempre puedes tirar de revistas de diseño, a ver qué te dicen. Y de talonario.

¿Tienes algún buen consejo a la hora de decorar una casa? No te cortes, es el momento…

Y si lo que te falta es la casa... ¡Ya sabes! Vente a nuestra web y encontrarás tu pido ideal :D