Estás en búsqueda activa de un piso de alquiler y cuando, por fin lo encuentras, alguien ha sido más rápido y se ha quedado con él. ¿Cuántas veces te ha pasado? En muchos países de Europa la oferta de vivienda en alquiler no es suficiente para la gran demanda que existe. Y eso, en el corto plazo, parece que no tiene pinta de solucionarse. Un informe de Savills Aguirre Newman asegura que los retrasos en la actividad de construcción que se produjeron durante 2020 pueden provocar que ese desequilibrio aumente y que, por tanto, se complique un poco más hacernos con ese piso perfecto.

Desde que localizas al propietario, os ponéis de acuerdo para visitarlo y te lo piensas un poco, pero muy poco, pasa un tiempo precioso que no te puedes permitir. En Spotahome resolvemos este problema y hacemos ese trabajo por ti. Contamos con un catálogo de más de 150.000 alojamientos en 100 ciudades de Europa a los que puedes acceder mediante un tour virtual. Cada vivienda dispone de información detallada y puede ser visitada digitalmente mediante fotografías 360º y vídeos en alta calidad para llegar a todos los rincones. También incluye planos digitales a escala con las dimensiones de cada habitación, e información completa acerca del barrio en el que se encuentra y de su área de influencia. Todo ello, con atención en seis idiomas, para que no haya barreras y puedas tomar una decisión sin precipitarte. Mucho mejor, ¿verdad?

En los últimos años hemos ayudado a más de 120.000 inquilinos a encontrar su nuevo hogar, y queremos poner esa experiencia a tu disposición con los siguientes consejos que te ayudarán a valorar si estás ante tu próximo hogar:

  1. Presupuesto flexible

Lógicamente, en el momento de iniciar la búsqueda ya te habrás marcado un presupuesto de gasto. Nadie sabe mejor que tú hasta dónde llegan tus posibilidades económicas, pero a veces somos excesivamente inflexibles en este aspecto. Si has encontrado una oportunidad que es un poco más cara de lo previsto, piénsatelo dos veces antes de descartarla. Y si, bajo ningún concepto lo puedes asumir. No te rindas. Trata de hacer algún pequeño ajuste por otro lado o negociar el resto de gastos con el propietario. Nunca se sabe.

2. Características del barrio

Si la casa que has encontrado se encuentra justo en la calle que tenías en mente, no tenemos nada que decir. Pero seamos realistas, esto no siempre sucede. Si la zona te genera dudas, ¿por qué no convertirte en tu propio mystery shopper?

Organízate para acercarte una mañana o una tarde y hacer algo que harías normalmente: los recados de la semana, ir a tomar unas cañas con amigos, dar un paseo y tomar un café… Cuando hayas probado la experiencia quizás tu opinión haya cambiado.

3. ¿Qué incluye el precio del alquiler?

Si tienes varias alternativas que te gustan, pero no te decides, te recomendamos que hagas una lista con lo que incluye el precio del alquiler en cada caso. Primero, conoce los gastos que están cubiertos (comunidad, alta de suministros, tasa de basura, calefacción, el Impuesto de Bienes Inmuebles… También es interesante que tengas claro el mobiliario que incorpora, electrodomésticos y cualquier tipo de accesorio. Marca con colores aquellos elementos que son importantes para ti y compara.

4. Alta en los servicios

Este es otro punto relevante que también puede influir en tu decisión. El alta de los suministros suele encontrarse a nombre del propietario, aunque sea el inquilino quien se haga cargo del importe. Pero podría ocurrir que el piso fuera nuevo y que este proceso no estuviera realizado. En ese caso, asegúrate de negociar con el dueño quién se hace cargo, pues el coste puede ascender hasta los 500 euros.

5. Aclara las garantías requeridas

Antes de firmar ningún contrato, debes tener en cuenta las garantías que se solicitan, ya que pueden variar dependiendo de cada circunstancia. Lo más usual es que te pidan una fianza equivalente a una mensualidad de la renta. Si no dispones de un contrato laboral de larga duración, como suele ser el caso de los estudiantes, los propietarios pueden pedirte alguna que otra garantía adicional, como podría ser un aval bancario. Asegúrate de cerrar bien este punto antes de tomar ninguna decisión.

6. Duración del contrato.

Por último, ¿eres un nómada o prefieres echar raíces? Es importante ser previsor a la hora de decidirte. Si te planteas una estancia muy a largo plazo puede ser una herramienta de negociación con el propietario, que siempre preferirá la estabilidad y, probablemente, lo premiará a la hora de negociar.