La oferta gastronómica en Madrid es prácticamente inabarcable. Tendríamos que salir a comer y a cenar todos los días fuera de casa y aun así tardaríamos años en repetir sitio. Por eso, vamos a hacer una lista de los locales de Madrid con fama y renombre. Esos que si sólo tuvieras una oportunidad, si mañana se acabase el mundo, pudieras degustar su especialidad y no fallar. Una guía de Madrid especialidad a especialidad.

Cocido

El plato típico de la cocina madrileña, el cocido, sabe mejor en casa. Pero hay un par de restaurantes en Madrid que consiguen que no añores tus momentos familiares. El famosísimo Lhardy (Carrera de San Jerónimo, 8) es el gran referente del cocido, con sus garbanzos en el punto exacto de cocción y atención de toda la vida. Un clásico en todos los sentidos. Más barato y buenísimo está el cocido de Cruz Blanca (Calle de Carlos Martín Álvarez, 58), en Vallecas.

Tortilla de Patatas

Seguramente, aquí cada uno tendrá su taberna o paraíso de la tortilla en Madrid. Aquí no puedo dar sólo uno. Las de Casa Dani (Ayala, 28), en la barra mismamente, merecen muchísimo la pena. Las del restaurante Ocafú (Calle Jorge Juan, 29), menos cuajadas, son deliciosas. De este estilo también son las de Taberna Pedraza (Calle de Ibiza, 38). Imprescindibles.

Caracoles

Yo no soy fan de este tipo de comida, lo reconozco, pero los amantes de los caracoles tienen que ir un domingo a disfrutar de la pasión con la que los hacen en Casa Amadeo (Plaza del Cascorro, 18). En esta casa de comidas tradicionales los encontrarás deliciosos. Además, el trato es muy familiar.

Huevos rotos

Fama local, nacional e internacional tienen los huevos de Casa Lucio (Cava Baja, 35). De hecho, tiene prácticamente enfrente una "sucursul" por y para degustar los famosos huevos rotos de Lucio en Los Huevos de Lucio (Cava Baja, 30). En este segundo será más fácil tener mesa, aunque también suele estar siempre llenísimo.

Cachopo

La fiebre del cachopo no sólo existe en Asturias también es omnipresente en Madrid. De ahí que en la mayoría de restaurantes asturianos hayan mejorado este suculento plato de carne (casi siempre para compartir entre varios, por su tamaño). El que más galardones tiene es el cachopo de La Charca (Calle Juan Álvarez Mendizábal, 7).

Cruasán

De siempre, los mejores han sido los de La Duquesita (Calle Fernando VI, 2). Pero si algo viene pegando fuerte últimamente son los archiconocidos "manolitos". Estos pequeños croissants, originales de Colmenar Viejo, ya tienen varias sedes en Madrid. La última en abrir fue Manolo Bakes (Plaza Santa Bárbara, 4).

Gin tonic

Y para cerrar, después de tanta especialidad, qué mejor que un digestivo, un buen gintonic. Yo apuesto sin duda por los del Cock (Calle Reina, 16). Ya he hablado de esta coctelería tan especial en algún post. Pues ahora también tienes que ir si ¡todavía no has probado sus gintonics!